
La idea era salir desde La Fontana y acercarnos hasta Salas Bajas para hacer unos centrifugados de cara a coger ritmo para el domingo. Trote de calentamiento por el Paseo Fluvial. Hoy no hay casi nadie. Gotas caen. El cielo encapotado, amenaza lluvia para las 20:00 ó las 21:00 según el oráculo que consultes.
En Salas Bajas parece que la climatología nos da una tregua. Hay bastante gente entrenando, entre ellos Maxi. Marcamos distancias para hacer el km. y para la zona de recuperación. Algo que Mario se lo pasa por… porque él empieza a dar vueltas a su ritmo.
Cuatro de mil, cada un@ al ritmo que puede y mejor sabe, con su periodo correspondiente de recuperación. Paramos y estiramos un poco. Vistos los resultados, esto hay que trabajarlo más. Hay que ir de menos a más. No podemos hacer peores tiempos en las vueltas finales, e incluso que hace un mes. La teoría la sabemos, pero a la hora de aplicarla nos puede “el ansiaaa”.
Trotando para enfriar de vuelta a la Fontana, la marcha se hace más pausada, la temperatura es agradable y, a pesar del agotamiento, todavía quedan ganas de subir el ritmo en el tramo final del Paseo. Doñana las tenía (y las puso) en la subida hacia la pasarela y más allá. Poco a poco seguro que mejorará tiempos. Ducha, cena y sofá, bendito sofá.

No hay comentarios:
Publicar un comentario